Redefiniendo Diciembre: Un Viaje Hacia el Amor Propio y los Límites

¡Hola, querida comunidad! 

Diciembre ha llegado, y con él, esa mezcla de alegría y ansiedad que parece acompañar a esta época del año. Desde pequeños, nos enseñan que diciembre es sinónimo de festividades, reuniones familiares y compras desenfrenadas. Pero hoy quiero invitarte a mirar este mes desde otra perspectiva, a desafiar esas expectativas y a priorizar tu propio bienestar. 

A lo largo de los años, he aprendido que no todas las tradiciones son saludables. Muchas veces, nos encontramos atrapados en situaciones que nos hacen daño: una familia que no respeta nuestros límites, un lugar que preferiríamos evitar o eventos sociales que nos generan más estrés que felicidad. ¿Cuántas veces hemos asistido a reuniones solo porque "se supone" que es lo que debemos hacer? Este diciembre, quiero recordarles que está bien decir "NO". 

Te propongo un cambio de enfoque. Este es el momento ideal para reflexionar sobre lo que realmente queremos y necesitamos. En lugar de dejarnos llevar por la presión social, invitemos a la introspección. Preguntémonos: ¿Qué me hace sentir bien? ¿Qué actividades me llenan de energía y alegría? ¿Qué límites necesito establecer para cuidar de mí mismo? 

Es fundamental recordar que el amor propio no es egoísmo; es una necesidad. Este diciembre, propongámonos practicar el autocuidado de formas que nos nutran y nos hagan sentir plenos. Puede ser tan simple como disfrutar de una tarde de lectura en casa, meditar, o pasar tiempo con personas que realmente aportan a nuestra vida. 

Además, es momento de resignificar las compras. En lugar de dejarnos llevar por la compulsión, reflexionemos sobre lo que realmente necesitamos. Tal vez este año, el mejor regalo que podemos darnos a nosotros mismos sea el de una Navidad consciente, donde cada elección que hagamos esté alineada con nuestro bienestar. 

Así que, este diciembre, te invito a que te des permiso para ser tú mism@. A que redefinas esta época del año, a que la llenes de momentos que te hagan sentir bien y que refuercen tu amor propio. No hay una manera correcta de vivir esta temporada; lo importante es que encuentres la tuya. 

Celebremos diciembre desde un lugar de autenticidad y amor. ¡Te animo a que comiences este viaje de resignificación conmigo! 

Con cariño,  

Ricardo Paredes

Psicólogo Clínico